maquinista.

Aunque las tareas varían en función del sector industrial, las responsabilidades típicas de un maquinista incluyen las siguientes:

• configuración de las máquinas para su correcto funcionamiento. Como maquinista, conectarás las piezas de cada aparato de acuerdo con las especificaciones del fabricante y de la tarea que vayas a realizar. Además, serás responsable de configurar la información operativa de la máquina, como la velocidad, el tamaño y la forma del corte. Antes de comenzar a producir, también deberás comprobar la calibración de la máquina.
• resolución de problemas y el mantenimiento de la maquinaria. Como maquinista, debes supervisar el correcto funcionamiento de los equipos. Tu trabajo incluye la detección de problemas y encontrar la solución antes de que adquieran mayor gravedad. A intervalos periódicos probarás el funcionamiento de las máquinas, comprobarás si hay algún fallo y lo rectificarás. También es tu labor limpiar las piezas de la maquinaria empleada después de cada ciclo de producción o de trabajo.
• cumplir los protocolos de seguridad. Como maquinista has de cumplir con todos los procedimientos y prácticas relacionadas con el funcionamiento seguro de los aparatos. Tomarás todas las medidas necesarias para proteger las máquinas utilizadas en el lugar de trabajo a fin de reducir el riesgo de lesiones. Como operario de maquinaria debes llevar el equipo de protección adecuado mientras estés de servicio.

Los maquinistas trabajan principalmente en compañías manufactureras, almacenes, talleres o plantas de producción, por lo que la mayor parte del tiempo trabajarás en el interior de la instalación correspondiente. Tu trabajo se llevará a cabo en un ambiente limpio, bien iluminado, con áreas ventiladas y a menudo conducirás maquinaria de alta velocidad. En este ambiente de trabajo, es imprescindible cumplir los plazos y mantener una velocidad de producción constante. Tu jornada laboral la pasarás sentado, de pie o  caminando. Dependiendo del entorno, quizá debas levantar objetos de cierto peso.

Si vas a trabajar como maquinista en una empresa de construcción, minería o perforación, te desplazarás dependiendo de la función requerida. Durante tu jornada debes llevar ropa de protección (como guantes de seguridad, tapones para los oídos, gafas y botas con puntera de acero). De trabajar en una empresa de producción de plásticos, o cualquier otra que genere emanaciones tóxicas, habrás de añadir a tu ropa de seguridad una mascarilla.

Como maquinista es posible que trabajes en empresas de construcción o en fábricas. Por ello, entre tus colegas encontrarás operarios en general, mozos de almacén, manipuladores de materiales y compañeros encargados del sistema CNC (control numérico por computadora), así como otros maquinistas, torneros y operarios. Al mismo tiempo, compartirás tu jornada laboral con técnicos de mantenimiento, supervisores de producción y otros especialistas, tales como montadores y torneros.

Algunos maquinistas tienen una jornada de 40 horas semanales. Teniendo en cuenta que la mayoría de fábricas dividen la jornada en varios turnos, quizá tengas que trabajar de día o de noche. En los periodos con más producción, es posible que hagas horas extras los fines de semana o durante tus vacaciones. Otra alternativa es trabajar para una única empresa, o bien hacerlo para distintas compañías como autónomo o con contrato laboral. Dadas las características del puesto, no es posible teletrabajar, al ser el manejo de la maquinaria una labor práctica que exige que estés en el lugar de trabajo para prestar tus servicios.

A medida que aumenta el número de empresas que apuesta por la automatización, los operarios necesitan formarse y aumentar su versatilidad. El número de ofertas de empleo a las que puedas responder variará dependiendo de tu especialización. Como la profesión crece de forma constante, tienes diversas alternativas para desarrollar tu carrera laboral. Una opción es especializarte en funciones de manejo de maquinaria específica para convertirte en operador de carretillas elevadoras o de grúas. Otra alternativa es potenciar tus aptitudes y tu nivel de experiencia para ascender a puestos de supervisión como jefe de producción, supervisor de ventas o gestor de inventarios.

Encontrar tu puesto de trabajo como maquinista a través de Randstad te permite disfrutar de importantes ventajas, como las siguientes:

• una amplia variedad de oportunidades de formación y desarrollo profesional
• disponer de una persona de contacto con experiencia en el sector que te ayudará si lo consideras necesario
• conocer cuál es el abanico de oportunidades laborales en la zona donde resides
• cobrar semanal o mensualmente dependiendo de tu puesto de trabajo
• firmar un contrato temporal o fijo

¿Buscas un contrato indefinido? Comenzar con un empleo temporal como maquinista conduce a menudo hacia un puesto de trabajo fijo. Cada año, miles de personas consiguen un contrato indefinido con grandes empresas gracias a un empleo temporal que encontraron a través de Randstad. Además, muchas empresas confían en Randstad para contratar a sus empleados fijos.