sostenibilidad, equidad y crecimiento: claves para un impacto empresarial.

Por Sander van ‘t Noordende, CEO global de Randstad.

Ahora que nos encontramos despidiendo la Semana de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU, las empresas deben reconocer que este momento es algo más que una revisión de sus objetivos de sostenibilidad. Es una llamada a la acción; una oportunidad crítica para que nosotros, como líderes empresariales, reevaluemos y amplifiquemos, si es necesario, el impacto que podemos tener.

Para nosotros, en Randstad, esto significa centrarnos en cómo la sostenibilidad, la equidad y el crecimiento empresarial van de la mano.

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un impacto duradero más allá de la cuenta de resultados

Las empresas son más que entidades económicas; son actores clave en la configuración de un mundo mejor y en el fomento de un futuro mejor para las generaciones venideras. Para tener un impacto significativo, las empresas deben centrar sus esfuerzos de sostenibilidad en áreas directamente relacionadas con sus operaciones, donde puedan crear un cambio real y medible. No se trata de seguir un planteamiento único, sino de alinear las estrategias de sostenibilidad con los principales puntos fuertes de la empresa y centrarse en áreas tangibles que fomenten el impacto a largo plazo.

El mejor enfoque consiste en centrarse en los ODS en los que se puede tener un mayor impacto. No se trata de hacer un poco de todo, sino de hacer lo necesario y hacerlo bien, en volumen y a lo largo del tiempo. Si queremos obtener resultados reales y duraderos, las empresas deben alinear sus esfuerzos de sostenibilidad con sus principales puntos fuertes.

Por ejemplo, una empresa del sector de la automoción puede centrarse en reducir las emisiones y acelerar el desarrollo de vehículos eléctricos, mientras que las empresas tecnológicas pueden dar prioridad a los centros de datos energéticamente eficientes o a programas innovadores de reciclaje de residuos electrónicos. En el comercio minorista, reducir el uso de plásticos o promover cadenas de suministro sostenibles podría ser una prioridad. La clave está en asegurarse de que el enfoque es lo suficientemente nítido como para lograr un cambio duradero.

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un enfoque de la sostenibilidad basado en tres pilares

Como empresa líder mundial en talento, las personas están en el centro de lo que hacemos, por lo que hemos optado por alinear nuestra estrategia de sostenibilidad con nuestro núcleo, centrándonos en áreas en las que podemos tener el mayor impacto y garantizar resultados duraderos: promover un mercado laboral justo, fomentar la equidad en el trabajo y apoyar la transición ecológica.

Como líderes, todos tenemos la responsabilidad de promover un mercado laboral justo que proporcione trabajo decente para todos, lo que incluye salarios dignos, la defensa de los derechos de los trabajadores y la promoción de condiciones de trabajo seguras y equitativas. Al fomentar unas condiciones laborales equitativas, las empresas no sólo mejoran su licencia social para operar, sino que también generan confianza entre los empleados y las comunidades en general.

En el núcleo de cualquier empresa que aspire a la sostenibilidad, el principio de equidad en el trabajo debería ser fácilmente identificable. Las empresas que crean entornos integradores -en los que se valoran las diversas perspectivas y todo el mundo tiene acceso a las oportunidades- están mejor equipadas para impulsar la innovación y afrontar retos complejos. La equidad es un imperativo estratégico que conduce a equipos más comprometidos, creativos y productivos. De hecho, según el informe Randstad Workmonitor 2024, el 38% de los trabajadores afirma que no elegiría una empresa cuyos valores sociales y medioambientales no coincidieran con los suyos.

En tercer lugar, el cambio climático es uno de los problemas más urgentes de nuestro tiempo, y las empresas tienen que estar a la vanguardia de los esfuerzos para apoyar la transición ecológica mediante la reducción de las emisiones de carbono y la implantación de prácticas sostenibles. Desde la inversión en energías renovables hasta la mejora de las cualificaciones y el fomento de las economías circulares, las empresas que contribuyan activamente a la transición ecológica estarán mejor posicionadas para prosperar en un futuro en el que la sostenibilidad sea una expectativa innegociable.

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mirando hacia el futuro

La Semana de los Objetivos de Desarrollo Sostenibles de la ONU constituye, sin duda, un hito importante. Pero es sólo el principio. La consecución de estos ambiciosos objetivos requerirá un esfuerzo sostenido respaldado por un enfoque dedicado y estratégico. Como líderes empresariales, debemos mirar más allá de este momento y comprometernos con un cambio que perdure.

Tenemos que pensar de forma crítica sobre dónde pueden tener nuestras empresas el mayor impacto posible y actuar con decisión. El futuro de la sostenibilidad depende de esfuerzos centrados en la equidad que den prioridad tanto a las personas como al planeta. Este no es solo un momento para reflexionar: es un momento para liderar.