montador.

Algunas de las tareas de un montador incluyen:

1. estudio e interpretación de las instrucciones de montaje: durante tu trabajo como montador, te asegurarás de que las partes ensambladas coinciden con las especificaciones de la empresa. Para lograr esto, leerás las instrucciones y estudiarás los diseños antes de montar los productos. Si eres el jefe de tu equipo de montaje, les explicarás las instrucciones al resto de tus compañeros y te asegurarás de que todo el mundo entiende cuáles son sus obligaciones.
2. leer bocetos y planos: aparte de escuchar las instrucciones de los supervisores, también tendrás que leer los planos y los bocetos de los componentes. Esto te ayudará a visualizar los productos antes de que comience el proceso de montaje. Entender los anexos a cada parte del ensamblado te servirá para interpretar las medidas, verificar las especificaciones e identificar de cada parte y los subensamblajes que sean necesarios.
3. ensamblar herramientas y materias primas: como montador, se espera que reúnas las materias primas necesarias para el proceso de montaje. Comprobarás si dispones de todas las partes y cuáles son sus medidas. Si la empresa no dispone de las partes requeridas, te asegurarás de que los supervisores sean conscientes de esta escasez en el inventario de la compañía. Al mismo tiempo, prepararás tus herramientas de mano y revisarás el equipamiento antes de comenzar el montaje, ya que un equipamiento defectuoso te llevará a crear productos de baja calidad y provocará interrupciones en el proceso de ensamblado.
4. asegurarte de que todas las partes encajan correctamente: en esta profesión vas a montar componentes utilizando herramientas manuales o equipamiento dedicado. Debes asegurarte de que las partes encajan y que han sido atornilladas para conseguir un resultado final de la calidad adecuada. En caso de experimentar algún tipo de incidencia, debes informar de los errores en la línea de producción a quien corresponda y encontrar soluciones para que todo funcione mejor.
5. efectuar controles del inventario: tras el montaje es frecuente que se agoten algunos recursos del inventario. Comprueba las existencias disponibles y asegúrate de que se repone lo que falta en las estanterías. En ocasiones, tendrás que hacer el pedido de los suministros necesarios para seguir trabajando en los días siguientes.

Como montador, trabajarás en un ambiente industrial y es probable que tengas que manejar maquinaria pesada y equipamiento complementario. Dependiendo de tu área de especialización, trabajarás en diversas industrias. Por ejemplo, algunos montadores se dedican a las industrias aeroespacial, textil, tecnológica, sanitaria, alimentaria o de bebidas. Tendrás un punto designado en la línea de fabricación donde permanecerás mientras realizas tus tareas. Puesto que tu trabajo implica el uso de herramientas manuales y maquinaria pesada, asegúrate de que llevas guantes y gafas de protección para evitar accidentes. El puesto de montador requiere energía física, puesto que deberás levantar objetos pesados y te tocará estar de pie durante largos periodos de tiempo durante tu turno de trabajo.

Puedes trabajar como montador o ensamblador en una amplia gama de industrias, incluyendo sectores como la construcción y la industria manufacturera. Lo anterior significa que interactuarás con distintos profesionales, tales como supervisores de producción, soldadores y constructores de molinos. De igual modo, interactuarás con coordinadores de proyecto, ingenieros mecánicos y encargados de fábrica. Otros especialistas con los que quizás te relaciones durante tu jornada laboral son los operarios de maquinaria estándar y de maquinaria computarizada con control numérico (fresadores y torneros, entre otros).

El turno de trabajo de un montador depende del tipo de contrato y de la complejidad de las tareas que deba realizar.  La mayoría de las fábricas tienen turnos durante las 24 horas del día y los siete días de la semana. Tendrás que alternar entre los turnos de día, de noche o de madrugada para asegurar que la producción continúa con normalidad durante cada jornada.

Los montadores disponen de numerosas oportunidades para el crecimiento profesional, puesto que comienzan su carrera desde una posición junior. En la medida en que adquieras experiencia y cualificaciones adicionales, podrás considerar la opción de convertirte en carretillero, maquinista o técnico. Además, si llevas a cabo tu trabajo de manera correcta, podrás conseguir puestos mejores, como jefe de equipo, supervisor de producción o gerente de proyecto.

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