Dos de cada tres trabajadores españoles anteponen su vida personal a la profesional
Randstad ha llevado a cabo un estudio sobre qué es lo que valoran los profesionales en un empleo y cómo relacionan su vida personal con la profesional, analizando para ello los datos de la última oleada del estudio Randstad Workmonitor.
- Más de la mitad de la Generación Z y los Millennials dejarían su trabajo si les impidiera disfrutar la vida, frente a un tercio de los Baby Boomers
- El 40% de los españoles solo trabajarían en empresas responsables con su entorno
- Un tercio de los trabajadores de nuestro país han renunciado a un empleo porque no ofrecía la suficiente flexibilidad
- El 65% de los españoles se siente comprometido a su empresa, mientras que el 19% busca empleo de manera activa
- Valentín Bote, director de Randstad Research: “Las empresas están obligadas a adaptarse a las demandas y preferencias de los candidatos si no quieren perderse oportunidades”
Randstad, la empresa de recursos humanos número 1 en España y en el mundo, ha llevado a cabo un estudio sobre qué es lo que valoran los profesionales en un empleo y cómo relacionan su vida personal con la profesional. Para ello, ha analizado los datos de la última oleada del estudio Randstad Workmonitor, elaborada a partir de más de 13.500 encuestas a profesionales ocupados de 33 países.
Randstad destaca que el 65% de los trabajadores españoles considera más importante su vida personal que la profesional, un porcentaje seis puntos porcentuales superior a la media de todos los países encuestados, situada en el 59%.
Comparación de las percepciones de los españoles y la media de la encuesta
Fuente: Randstad
De hecho, el 45% de los profesionales de nuestro país estaría dispuesto a dejar su trabajo si no le permitiera disfrutar de su vida personal, y el 42% asegura que lo ha hecho. El 29% preferiría estar desempleado a ser infeliz en un trabajo, y el 56% no trabajaría de no tener obligaciones económicas.
“No es ningún secreto que los profesionales cada vez exigen beneficios y valores que van más allá del sueldo a la hora de encontrar trabajo. En una situación en la que la escasez de talento lastra la recuperación, a menudo las empresas están obligadas a adaptarse a las demandas y preferencias de los candidatos si no quieren perderse oportunidades”, asegura Valentín Bote, director de Randstad Research.
En el conjunto de los países, los segmentos de edad más jóvenes son los que más priorizan la vida profesional sobre la personal. El 56% de la Generación Z y el 55 % de los Millennials afirman que dejarían su trabajo si les impidiera disfrutar de la vida, en comparación con poco más de un tercio (38%) de los Baby Boomers.
Por otro lado, la Generación Z y, en particular los Millennials, están listos para priorizar su felicidad general por encima de su carrera, ya que casi dos de cada cuatro (40% y 38% respectivamente) dicen que prefieren estar desempleados que infelices en un trabajo, un porcentaje que solo es del 25% en el caso de los Baby Boomers.
En cuanto a las posibilidades de dejar un trabajo si son infelices, el 56% de la Generación Z y el 55 % de los Millennials estaría dispuestos, mientras que el 41% de la Generación Z y el 40% de los Millennials, afirma haber renunciado con anterioridad a un trabajo porque no encajaba con su vida personal, por delante de las generaciones mayores más conservadoras.
El 40% de los españoles solo trabajarían en empresas responsables con su entorno
Los españoles también consideran muy importante sus valores a la hora de trabajar. El 43% de los profesionales no aceptaría un trabajo en una empresa que no se esfuerce en mejorar su diversidad y equidad, el 40% en el caso de que no lo hiciera en materia de sostenibilidad, y el 38%, si no se involucrara en cuestiones sociales y ambientales. Una decisión que suele estar por encima de la media de la encuesta, que se encuentra en el 41%, el 39% (el único inferior), y el 43% respectivamente.
Comparación de las percepciones de los españoles y la media de la encuesta
Fuente: Randstad
De hecho, el 42% de los profesionales de nuestro país estaría dispuesto a cobrar menos si su trabajo contribuye en algo a mejorar la sociedad (frente al 34% de la media mundial). Por otro lado, el 69% considera que sus valores coinciden con los de los empleadores, mientras que la media mundial se sitúa en el 73%.
De nuevo, los jóvenes son los que están más dispuestos a cambiar de trabajo, en este caso, si sus valores no coinciden con los de su empresa. Casi la mitad de los Millennials (48%) y la Generación Z (49%) no aceptaría un trabajo en una empresa que no se alinea con sus valores en cuestiones sociales y ambientales en comparación con poco más de un tercio (35%) los de Baby Boomers.
Una cantidad similar (49% y 46% para Generación Z y Millennials respectivamente) dijeron que no trabajarían para una empresa que no hiciera un esfuerzo proactivo para mejorar su diversidad y equidad en comparación con un tercio (33%) de sus mayores. A dos de cada cinco (42% para la Generación Z y 40% para los Millennials) no les importaría ganar menos dinero si sintieran que su trabajo está aportando algo al mundo o a la sociedad, en comparación con solo una cuarta parte (25%) de los Baby Boomers.
Uno de cada tres españoles ha renunciado a un trabajo por no ser flexible
En general, los trabajadores españoles son más fieles a sus empleadores que sus compañeros de otros países. El 65% se siente comprometido a su empresa (frente al 60% de media), mientras que el 19% busca empleo de manera activa (frente al 22%).
En este compromiso hacia la empresa, tiene mucho que ver los beneficios que ofrezcan los empleadores. El 38% de los profesionales de nuestro país no aceptaría un trabajo si no dispusiese de flexibilidad en cuanto al lugar de trabajo, y el 41%, en cuanto a los horarios. De hecho, un tercio de los españoles han renunciado a un empleo porque no ofrecía la suficiente flexibilidad.
Otros aspectos muy valorados por los profesionales de nuestro país son la importancia de la conciliación entre vida personal y profesional -elegido por el 96% de los profesionales, frente al 94% de la media mundial-, las opciones de formación -elegido por el 81%, frente al 76% de media-, un sueldo más atractivo -el 65%, frente al 60%-; y las posibilidades de crecimiento -46% frente al 40%-.