El 69% de los empleados quiere teletrabajar, pero su empresa no se lo permite
La demanda de teletrabajo es más habitual entre los profesionales de entre 25 y 45 años, donde el porcentaje asciende hasta el 78%, seguido del grupo de los menores de 25 años (64%) y, por último, los mayores de 45 años (58%)
Randstad, la empresa de recursos humanos número 1 en España y en el mundo, ha elaborado un estudio sobre la preferencia del lugar de trabajo de los ocupados según su edad, su nivel formativo y su país de residencia. Para ello, ha analizado los datos de Randstad Workmonitor, elaborada a partir de más de 13.500 encuestas a profesionales ocupados de 33 países.
El análisis de Randstad revela que el 68,6% de los empleados españoles quiere teletrabajar, pero no puede porque su empresa no lo permite. A pesar de que en muchas ocasiones se considera el teletrabajo una demanda habitual entre los más jóvenes, la investigación de los resultados de Randstad Workmonitor desvela que no es del todo cierto. De hecho, por grupos de edad, los que más solicitan este tipo de medidas son los empleados de entre 25 y 45 años, en concreto el 78% de ellos. A continuación se sitúan los trabajadores menores de 25 años (64%), y, por último, los mayores de 45 años (58%).
Otro de los aspectos que analiza el informe elaborado por Randstad es el sistema de trabajo que tienen las compañías actualmente, donde se revela que casi siete de cada diez empresas mantienen actualmente la metodología “tradicional” de trabajo. Este dato contrasta con los deseos de los empleados, ya que, como hemos visto, el 68,6% de los profesionales desearía poder trabajar desde su casa u otro lugar, aunque su empresa no se lo permite. Por su parte, el 57,5% de los ocupados cree que en su empleo actual dispone de todo lo necesario para poder teletrabajar.
“El teletrabajo ocasional debería verse como una opción beneficiosa para todas las partes: para el profesional porque le posibilita ser más eficiente a la hora de llevar a cabo su actividad y le produce ahorros en tiempos improductivos (desplazamientos, ineficiencias en el lugar de trabajo e incluso reuniones más cortas); y para la empresa, porque la satisfacción de sus empleados redunda en mejores ratios de eficacia, lo que mejora los resultados de su negocio”, declara Miguel Valdivieso, director de Randstad Human Capital Consulting.
“Contar con medidas de teletrabajo y flexibilidad tiene un efecto directo en la satisfacción de los empleados. La conciliación entre trabajo y vida personal es el segundo factor más valorado por los profesionales para elegir una empresa en la que trabajar, según el Informe Randstad Employer Brand 2018”, señala Valdivieso.
Los profesionales que más quieren teletrabajar pero no pueden se encuentran en los países del sur de Europa. Grecia, Portugal, Italia y España tienen tasas de entre el 75% y el 69%. Le siguen Francia (64%) y Reino Unido (61%). A continuación, y por debajo de la media europea, se sitúan Luxemburgo (60%), Bélgica (57%) Alemania, Dinamarca (52%), Noruega (51%), Países Bajos (48%) y, por último, Austria (47%).
Fuera de las fronteras europeas, China es el país con la tasa más elevada de profesionales que no pueden teletrabajar (71%). A continuación, se encuentra Estados Unidos (66%) y, con menores índices, Japón (60%) y Australia (55%).
Sobre Randstad Workmonitor
Este estudio se lanzó en Holanda en 2003, después en Alemania y ahora cubre 33 países en todo el mundo. Con una publicación trimestral, el informe ofrece tendencias tanto locales como globales en el mundo del empleo. Para el análisis se realiza una encuesta online en población de entre 18 y 65 años que trabaje un mínimo de 24 horas a la semana. Para la oleada del cuarto trimestre de 2018, se ha contado con una muestra total de más de 13.500 entrevistas.